La leche materna puede utilizarse para preparar las comidas de tu bebé, aportándole sus innumerables nutrientes y anticuerpos.
Para una elaboración saludable y segura, tené los mismos recaudos que para extraerte leche y armar tu propio banco. Te recomendamos leer nuestro artículo ¿Cómo conservar la leche materna?
Para preparar papillas y otras recetas, podés usar leche descongelada, aunque siempre es preferible que sea recién extraída, para que puedas refrigerar sobrantes. Para los helados, en cambio, es necesario usar leche que no haya sido congelada: recordá que no podés descongelar leche para volver a freezarla.
Las recetas con leche materna pueden ser tantas como tu imaginación sugiera: probá, anímate, usá tu ingenio para crear menúes ricos y saludables para tu bebé.
HELADO DE LECHE MATERNA
Los helados de leche materna son ideales para bebés menores de 6 meses, cuando la alimentación se basa exclusivamente en leche. Esta preparación es perfecta para aliviar los efectos del calor en los pequeños o para calmar las molestias de la dentición: el contacto con el frío del helado ayuda a generar alivio y desinflamación de las encías congestionadas. Además, puede ser una forma de que consuma tu leche en el caso de que rechace la teta o la mamadera y, cuando queda al cuidado de alguien más, estos helados funcionan como una golosina sana y natural.
La receta consiste sencillamente en volcar leche recién extraída en moldes de helado pequeños o cubeteras con palitos (cuidando que no tengan puntas que puedan dañar la boca del bebé) y llevar al freezer, donde puede mantenerse por hasta 6 meses.
HELADOS CON LECHE MATERNA.
A partir de los 6 meses, para darle más sabor, podés sumarle a la leche materna alguna fruta o verdura que forme parte de la dieta de tu bebé.
HELADO TROPICAL
Licuá frutas de estación, preferentemente maduras para que le den más sabor. Agregales leche materna, llevá al freezer en moldecitos o cubetera ¡y listo!
Otras combinaciones que pueden inspirarte…
Leche materna + ananá + coco
Leche materna + banana + canela
Leche materna + avena remojada o cocida + manzana
Leche materna + palta
BATIDOS O FALSOS YOGURES CON LECHE MATERNA.
Los postres como el yogur falso o los batidos son otra buena alternativa como colaciones. La preparación es igual a la de los helados pero, en lugar de llevar el licuado al freezer, lo refrigerás en heladera y lo servís en mamadera o vasito.
Como veíamos en ¿Cómo conservar la leche materna?, hay que tener ciertos recaudos para garantizarnos la seguridad alimentaria de tu bebé. Si necesitás transportar la preparación, es importante que lo hagas en un bolso térmico con hielo.
PAPILLAS CON LECHE MATERNA
Cuando llega el momento de incorporar papillas a la alimentación del bebé, prepararlas con leche materna puede resultar de gran ayuda ya que el sabor familiar de la leche lo ayudará a asimilar mucho mejor las primeras papillas.
PAPILLA DE ZANAHORIA, POLLO Y LECHE MATERNA
Cociná un trocito de pollo con una zanahoria pequeña. Podés hacerlo al horno o hervidos en una ollita con agua. Cuando la zanahoria esté tierna, mixeala con el pollo (o pisá con ayuda de un tenedor). Agregale leche materna y, si querés, una cucharadita de aceite. ¡Voilà! Una papilla de preparación sencilla y súper nutritiva. Ahora, a desplegar la imaginación.
Te damos un empujoncito con algunas combinaciones…
Leche materna + carne magra cocida + brócoli hervido
Leche materna + lentejas cocidas + zapallo hervido